Los sabuesos de Miskatonic – 03

Tras culturizarse un poco en la biblioteca de la universidad nuestros investigadores deciden que es un buen momento de ir a buscar al ayudante del profesor, Terence Freeman, así que tras intentar entrar en su despacho con el carne de la biblioteca del profesor Goodhill a modo de radiografía por manos de Steve, se dan cuenta que no son muy dados a entrar en lugares cerrados con llave, así que van a comer al bar y se encuentran a Terence Freeman hablando con el rector de la Universidad James Lorfield.

James Lorfield.jpg
El excelentísimo rector James Lorfield
terene freeman.jpg
El guapeton Terence Freeman

Estos dos ven a nuestros investigadores y como estos esperan afuera de la cafetería, así que hablan de cosas hasta que Terence parece salir a hablar con ellos. Estos que han esperado pacientemente afuera respetando la intimidad de ambos son recompensados con un paseito por el campus hasta llegar al diminuto despacho del profesor interino Terence Freeman, el cual es sobrio y ordenado como un soldado alemán, en la pared ven el mapa de Canadá y el título de antropología del hombre, también destaca una única fotografía en el despacho, la de él junto con tres hombres en el monte Ringrose en Canadá en 1929.Terence Freeman Hikers

La conversión con Terence es bastante fluida, eso sí, parece como si dos perros se oliesen el trasero para saber las intenciones el uno del otro, y ninguno de ellos acaba confiando en que cuando se giren el otro le morderá el culo. La conversación digamos que coge un camino muy… policial, los investigadores empiezan a hacerle preguntas sobre la expedición, el profesor y lo ocurrido, Terence, que joven como es responde sus preguntas hasta que llegado a cierto nivel de interrogatorio decide preguntarse «Oye, y quien cojones son estos tíos que irrumpen en mi vida a preguntarme sobre mi amigo muerto?» así que las tornas cambian es él quien empieza las preguntas, porqué descubristeis el cadáver de Goodhill, sabéis algo de un medallón de la expedición que falta, como os llamáis… cosas así. Pero estos en su dinámica deciden ir a medio gas, «¿Que medallón?, así que valioso, eh?» así que no acaban de aclararse las cosas, pero creo que ambos acaban sintiendo que buscan lo mismo, así que este les pide que si descubren algo, en especial el paradero del medallón cree que hallará el culpable de la muerte del profesor, así que les dice que si quieren contactar con él, si no esta en su despacho que le dejen una nota debajo la puerta que la leerá en cuanto la vea, ya que los investigadores no confían demasiado en la rubia de recepción, que seguro que esta metida en el ajo. También preguntan vagamente sobre las pistas, al estilo «Le suenan de algo las palabras Yde Etad?» a lo que el profesor, lo único que le viene a la cabeza es «Suena a Sumerio, deberías hablar con Dyer», o preguntas «Y si le digo AAdoscientosyalgoR le suena?» con lo que el profesor responde contundente-mente, NO, pero esto es sospechoso según los investigadores, así que dejan aun muchas preguntas en el tintero y deciden que Terence esta muy cansado y que debería irse a dormir, no antes sin que Steve Harrington con su gran dote de lenguas, intente convencer a Freeman FREEMAN! que no diga a la poli que han pasado a preguntarle cosas sin importancia, que quizás les pondría en un compromiso, claro está que Terence decide que mejor que se vayan ahora si, y que hablará con quien le salga de ahí.
No hace falta decir que aquí hay jugo que se queda sin exprimir por parte de ambos, pero es que cuando no hay feeling… las cosas…no… que no…
(Y yo pensando que si pongo a un chico guapo y joven, será más fácil de confiar en él más que en un viejo estirado profesor de la universidad, iluso de mí. Esto les pasa por no tener a la noruega de Sarah en la sala, un toque femenino hubiera calmado el tema.)

Pues eso, que se marchan a hablar en corrillo para decidir si confiar en ese hombre o no, con lo que ya al tarde deciden largarse al piso franco de Deckard, donde se encuentran al dueño del piso, Don Ray Donovan, un hombre de dudosa reputación que no queda muy claro a que se dedica, pero digamos que no puedes encontrar su teléfono en las paginas amarillas, recordemos que tiene «pisos francos».

Gallery
Ray Donovan, el «hombre que soluciona problemas»

Tras las presentaciones un poco tensas, «QUE COJONES HACÉIS EN MI PISO DE NOCHE?!» donde sino saca un bate es porque no lo encuentra, deciden que es un buen hombre en quien confiar y que les acompañe en su investigación (se nota que tienen buen ojo en quien confiar)
Lo ponen al día entre esa noche y al día siguiente, y deciden que es el momento de ir a asaltar la casa del profesor Goodhill, que ya estaban tardando en hacer algo ilegal.

En la calle Hyde 246, esquina con Amirage St. hay un edificio de 3 plantas de clase media-alta, con portero quien tras un soborno más que apropiado les deja las llaves del piso de Goodhill y les permite entrar.
Los investigadores, ya veteranos husmear sitios, descubren que el piso del profesor ha sido registrado previamente, pero saben que la policía no ha sido, así que lo único que acaban encontrando es un listado de la compra donde figuran los botes de cristal que encontraron en la torre Copley, con ajo y sepiolita, y también hay tiza en la lista de la compra, Steve también halla un papel con la dirección de un despacho de la Universidad y tras husmear a fondo el piso, deciden que es un buen momento para irse a casa a poner al día a Sarah que hoy tenia un examen importante y tuvo que ausentarse en sus actos delictivos habituales, quiero decir en la investigación.

Detalles de la sesión: 
– Se han quedado con el gusanillo que Terence sabe más de lo que cuenta, aunque no se fían de él.
– Ray Donovan ha tenido una relacion amorosa/sexual con la hermana de Deckard.
– El nombre de Deckard es Mainard.
– El apellido de Thomas es Thompson.
– Ray Donovan resuelve las cosas a base de pasta y bravuconeria.
– Tanto Ray como Deckard confiensas sus experiencias vividas con los mitos.
– El caso Rowley y el Zoologico, han sido mencionados pero no estudiados.
– Hasta el año que viene (1933) la Ley Seca es vigente, donde dijimos cerveza dijimos zumo de arándonos.
– El fanalillo de la biblioteca pública que asaltaron ahora está en la biblioteca de la Universidad.
– Las pistas las llevan siempre encima, incluido el medallón.
– La sesión termina el jueves 8 por la noche.

 

Deja un comentario