Bueno, esta vez intentaremos hacerlo bien y no dejarnos en el tintero las cosas más importantes, como las aventuras de Steve con la dinamita y sus cagadas en tirarla por la borda en un día de mala mar. Lo siento Jarque!
AH! Y antes de empezar… partida num.5 y aún no me habian dado un aspecto de sus personajes los muy bellacos, así que tras insistir mucho y recibir algún insulto por parte de Richi por insistir tanto… que evidentemente se lo pagaré prohibiendo utilizar habilidades especializadas en tiradas especializadas como bien sabe Berto sobre el Parkour… tenemos aspecto de mis JUGADORES!!! UEEEEEE!!!
Y el último, el mejor.
Gracias por esto chic@s lo necesitaba.
18 de Octubre de 1933, Hacia el Hielo Antártico.
Durante largos periodos de tiempo, el SS Gabrielle avanza inexorable hacia el Sur, y no ocurre nada más que mala mar. Cosa que deja a la mitad de la expedición entre vómitos y mareos, entre ellos James Starkweather (en algún periodo) y Peter Sykes.
En esta ocasión intentan aprender Explosivos que imparte clases el propio James Starkweather. También destacar que el tiempo empeora tanto en el exterior que cada vez es menos frecuente salir a cubierta, y que al final solo la tripulación es la que sale hacer tareas de vigilancia y mantenimiento.
Los investigadores aprovechan estas largas estancias para conocer un poco mejor a los miembros de la expedición, entre ellos James Starkweather, quien empiezan a ver que esta sufriendo cierto estrés debido a todo lo que esta ocurriendo en la expedición, aunque demuestra ser una persona de gran fuerza de voluntad. Concretamente lo ve Alan, quien muy alegremente le administra un supositorio contra el mareo… en serio… es así de gracioso el Doctor Grand.
26 de Octubre de 1933. En medio del Mar revuelto.
Steve Harrintong empieza a sentir curiosidad por lo que piensa la tripulación de la expedición, y quiere entablar conversación con los vigías, quienes parecen hacer un trabajo heroico saliendo a cubierta con este temporal.
Patéticamente Steve no esta acostumbrado a tanto tiovivo del barco y en un intento de ser amable y traerles café y sopa caliente, acaba tirándola toda al suelo y parte de ella encima de los marineros, quien por suerte se lo toman con humor, ya que les parece gracioso como estos «pringaos de la expedición» no aguantan un temporal de nada.
Tras un rato de conversación en la cual conoce a Abe y David (los vigías), a Steve le parece escuchar algo que esta suelto en la carga, algo grande. Cabe recordar que ni Alan, ni Sam, ni su puta madre escuchan una mierda…
Así que el bueno de Steve, preocupado por su imagen después de caer en un bote salvavidas borrachos unas noches atrás… intenta convencer a los vigías del ruido que escucha, así que empieza a buscar ayuda y les pide que esperen antes de salir a cubierta.
Pide ayuda a varios de los expedicionarios que no estan mareados, entre ellos a Alan Colt, Alan, Sam y ya… Todos ellos se reunen en la cafeteria antes de salir junto con Abe y David, quienes les acompañan a las bodegas y ayudar a estibar la carga. Equipados con linternas parecidas a porras, Steve abre la puerta que casi le arranca el brazo debido a la fuerza del viento, pero consigue controlarla y empiezan a salir.
Como hay tres bodegas deciden repartirse yendo tres grupos, uno a cada y así pasar el menor tiempo posible fuera. Uno de los grupos sufre una baja, ya que uno de los marineros cae al suelo y se empapa del agua helada y debe volver dentro, con esto Alan y Steve intentan comprobar sus bodegas y descubren que no son las suyas, asi que por destacarte acaba siendo la de Sam, quien no duda en bajar rápidamente abajo y averiguar que es lo que esta suelto.
Dos grandes motores del Boeing están sueltos y como bolas de demoliciones están rodando por la bodega destrozándolo todo. La solución es fácil, coger los cabos que hay en la pared de la bodega y amarrar los motores en algun punto seguro. La dificultad reside en esquivar a los motores que es una tarea sumamente dificil por culpa del balanceo tremendo que esta sufriendo el barco. Cabe añadir que para añadirle un poco más de emoción, los motores han destrozado unas cuantas latas de Queroseno y este se ha esparcido por toda la bodega haciendo un ambiente bastante molesto de respirar y encima altamente inflamable, con lo que las linternas que han traído se las entregan a los marineros que están en cubierta iluminando la bodega como buenamente pueden para evitar provocar un incendio.
Vale, resulta sencillo de arbitrar, cada 5 segundos tienen que tirar suerte para esquivar un motor, si fallan, una tirada de esquivar, si fallan un golpe de 2D6 directos, cada persona tarda 5 segundos en bajar la escalera, así que la primera persona (Sam) deberá aguantar 2 turnos con sus cojones abajo. Lo hace, y baja Alan y Steve, nadie resulta herido, aún… Al poco las cosas se encaminan bien, agarran el cabo y hacen un nudo, lo lanzan y agarran el motor. Tirada de fuerza enfrentada para amarrarlo… y aquí empieza en debacle… fallan… el motor se les viene encima, Sam recibe una ostia de ordago, otra vez tira… fallan, Alan recibe otra ostia de ordago, otra vez, tiran, fallan… Sam esta apunto de recibir la misma ostia cosa que seguro que la matará, pero Alan consigue sacarla de la trayectoria de manera milagrosa (fue un poco máster Mama, lo reconozco, no volverá a pasar por petición de la misma Sam, PROMETIDO!).
Así que tras todos estos desastrosos resultados uno de los marineros baja ha echar un cable, junto con Patrick Miles, (que se me olvido decirlo, pero también le convenció Steve que se apuntará) y todos juntos esta vez consiguen recuperar el motor, con uno bajo control el otro pronto esta recuperado.
Tras el desastre, hora de evaluar daños… Sam y Alan se van a la enfermería donde el doctor Greene les atiende mareado como un pato. Los demás, entre ellos Colt, Miles y Harrintong encuentran que las cadenas que sujetan los motores han sido corroídos por un ácido como el usado por Henning, y que eso a provocado que se suelte la carga.
Los motores han sufrido grandisimos daños siendo irreparables y por culpa de sus vaivenes han destrozado uno de los Boeing, también se han perdido la mitad de los litros de Queroseno que se usan en la Antártida como calefacción y para los equipos de soldadura.
Alan Colt, afirma que con tiempo podrán salvar el otro Boeing utilizando las otras piezas del avión destrozado, pero esto solo les dejará con dos Boeings y el Fairchild.
Tras todo esto, Sam a ganado una maravillosa cicatriz, junto con los demás un gran respeto de todo el mundo pues esto podría haber hundido el barco.
27 de Octubre de 1933.
En el desayuno y Briefing, el Professor Moore felicita a los que participaron en el rescate del barco el día anterior y analiza las causas y expone los daños provocados, con todo la
expedición se pone otra vez rumbo al sur y se dedican a subsanar los problemas que han causado los motores.
Evidentemente la duda de si es un sabotaje actual o aún son restos del sabotaje anterior aparece pero la idea de que sea actual queda bastante lejana (aunque no improbable) pues el ácido es el mismo y era imposible detectar un sabotaje así.
6 de Noviembre de 1933, Entrando en el Mar de Ross.
Podría seguir narrando lo que ocurre los días anterior del 6 de noviembre, pero el resumen es que van viajando hacia el sur cada vez adentrándose más en el hielo Antártico. En algún momento gracias a unas tiradas espectaculares de Psicología y Persuasión consiguen sonsacar al segundo oficial de la tripulación que este es el tramo más peligroso de todo el viaje, ya que si el barco se queda anclado en el hielo, es fácil perecer aquí. Con lo que aumentan los temores al hielo.
Pero volviendo al 6 de Noviembre… Uno de los vigías parece informar que ve algo en la lejanía, un barco, y pronto revelan es el Waalaroo, un ballenero que hace más de un año que no se sabía de él. Evidentemente los investigadores quieren saber que pasó, así que ya que viene de paso, convencen al capitán que les deje investigar, con la escusa de quizás rescatar algo de provecho para la expedición.
Así pues Steve, Sam, Alan, Jack Driscoll y Peter Sykes se aventuran a descender del barco, correr por el hielo y llegar al Waalaroo. Unas tiradas de Destreza para ver como se llevan con el hielo ya demuestran que hay quien más y quien menos que lo pasará mal en este viaje. Una vez llegados al Waalaroo, Alan quien ya sabia que había sido una explosión de la caldera la causante del funesto destino de este barco lo reafirma.
Sykes consigue enviar una garfio a cubierta del barco y empiezan a ascender por él y subir abordo, excepto Steve quien por desgracia la Destreza no es lo suyo, pero con ayuda lo acaba consiguiendo y gran disimulo, nadie le dice nada.
Lo que descubren dentro del Waalaroo, unos pocos cadáveres con heridas violentas seguramente producidos por la explosión de la caldera, y Sam quien no pierde oportunidad de investigar para su gran libro…(ingenua aún piensa que sobrevivirá al hielo cuando casi muerte por culpa de una maleta en el viaje que se ha soltado),
investiga directamente el camarote del capitán el cual encuentra muerto con un balazo en la sien y una botella de wisky vacía a su lado. En un fondo falso de un cajón del escritorio encuentra el diario de abordo, el cual relata la desafortunada aventura que corrió el navío. También menciona que los supervivientes se lanzaron a la suerte del mar en el bote salvavidas dirección norte.
Aparte de esto los demás encuentran en una caja fuerte de la bodega aparte de una cantidad brutal de carne de ballena podrida, una caja de 12 botellas de Whisky, la cual no dudan en llevarse para la casa. (POR FIN BOTÍN!…)
Así pues salen del Waalaroo con una sonrisa, por saber la historia y tener una recompensa alcohólica a sus problemas. Sam no pierde el detalle al mirar al norte, como a poco más de dos millas ve el bote salvavidas del Waalaroo, el cual confirma el porque no se encontraron supervivientes… dios les acoja… Vuelven al Gabrielle y continúan rumbo Sur.
10 de noviembre de 1933. El Hielo puro.
En algun momento de este día la fatídica tragedia de quedarse atrapados en el hielo se hace real, el Gabrielle que avanzaba pocos metros por hora, al final se queda varado en el hielo.
Los nervios aún no florecen porque aun funciona todo. No pasa nada. Podemos esperar o como propone James Starkweather, podemos usar la dinamita.
Todo el mundo opina que no hay tiempo que perder y se lanzan al plan divertido.
Bajan al hielo unos cuantos expedicionarios y colocan cargas en el hielo a pocos metros entre ellas para abrir un camino, a los pocos minutos están todas colocadas y al aviso de «CARGA CARGA CARGA» una detonación en cadena hace volar por los aires el hielo y se abre ante el Gabrielle un camino de agua que le permite seguir avanzando, felicidades el plan divertido ha funcionado.
12 de Noviembre de 1933.
El día transcurre lentoooo como una peli japonesa… Al final se quedan empiezan a reconocer el sonido de lo inevitable… el barco se va a quedar otra vez atrapado… apenas han avanzado desde la ultima vez… asi que se quedan atrapados again. El plan es conocido así que a por ello. hacen lo mismo y BUM BUM.. pero un carga falla.
Vale tranquilidad… como se soluciona esto? a suertes… el que saque la pajita más corta va y desactiva la carga… espera! Steve tiene otra idea… poner otra carga encima y detonarla, asi habrá menos riesgo… bueno vale acepto barco. (se la juegan a la pajita) y le toca a Tomas Lopez, un PNJ cualquiera de la expedición… casi de los que llevan la camisa roja en Star Trek… (el tema es facil, a quien le tocase iba con su tirada basica de explosivos, como es poner otra carga, era un +10 a la tirada, Tomás tiene un 8% con lo que le quedo un 18%, va se acerca y tira… 20%, lo siento Tomás)…
Tomás coloca la carga y deja lista, cuando se dispone a irse, con los nervios y el hielo, cae y el detonador le cae tambien, cosa que activa la dinamita y BOOOM! a tomar viento. El hielo se rompe y Tomás se hunde. Sam se niega a aceptar el destino funesto de este PNJ!
Así que se lanza al agua helada y ve como se hunde en el fondo inconsciente…. lo siento… no puedes hacer nada… Tomás a muerto…
Al menos consiguen avanzar… y el día transcurre sin más incidentes.
Tras dos días más de hielo consiguen entrar en el Mar de Ross y esta vez si que es un mar. Agua! AGUA DE VERDAD!
Ven la Antártida y se dirigen a desembarcar.
14 de Noviembre de 1933.
Atracan y se disponen a desembarcar, pero están tan agotados de escucharme hablar que paramos la partida aquí.
Detalles de la sesión:
- No han desembarcado nada
- Han conseguido arreglar parte del Boeing pero los mecanicos aun tienen que montarlos.
- Hay prisa para descargar las cosas pues es una placa de hielo que esta apunto de desprenderse y la puede liar gorda.
- Alan y Sam tienen heridas arrastradas del motor suelto.
- La expedición de Acacia Lexintong llego hará 3 días, no la han visto.
Héroe Sin Cordura 